Updated on September 29, 2023
A las personas que viven con enfermedades crónicas como el VIH se les aconseja "Ser su propio promotor de salud". Serlo significa hacerse cargo de su diagnóstico, su tratamiento y sus necesidades como paciente.
A continuación, encontramos algunas estrategias que pueden ayudar.
Conozca lo básico
Es posible que ya conozcas los aspectos básicos de la infección por el VIH: el VIH es un virus que ataca a las células que combaten infecciones en tu cuerpo, llamadas células CD4.
Con el tiempo, el VIH puede reducir gravemente el número de células CD4 en el organismo. Esta fase de la enfermedad se conoce como síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA).
Durante esta etapa, el cuerpo tiene pocas defensas contra las afecciones que normalmente podría combatir o prevenir, incluidas las infecciones graves (llamadas infecciones oportunistas) y ciertos cánceres.
Conozca el tratamiento
El tratamiento debe comenzar inmediatamente después del diagnóstico del VIH. El tratamiento estándar del VIH es la terapia antirretroviral (TAR).
La terapia antirretroviral consiste en tomar medicamentos que impiden la replicación del virus. Esto suprime la carga viral (la cantidad de VIH en el cuerpo) hasta niveles indetectables o casi indetectables. También permite que el número de células CD4 aumente hasta niveles normales.
Mantener una carga viral suprimida y unos niveles de CD4 saludables puede prevenir las infecciones oportunistas y otras complicaciones. También ayuda a minimizar el riesgo de transmitir el VIH a otras personas, como a las parejas sexuales y, si estás embarazada, a los niños por nacer.
Los fármacos de la terapia antirretroviral deben tomarse exactamente como se han prescrito: dejar de tomar los medicamentos o tomarlos de manera irregular puede aumentar la carga viral, dañar el sistema inmunológico y hacer que el virus se vuelva resistente al tratamiento.
Es útil saber cómo actúan sus medicamentos, los puntos fuertes y las limitaciones de estos, y los diferentes tipos de terapia antirretroviral disponibles en caso de que su profesional de atención médica necesite cambiar o modificar los medicamentos que toma.
Más información acerca de cómo vivir con el VIH
Tómate el tiempo necesario para aprender más sobre la vida con VIH, incluyendo las consideraciones de salud a largo plazo, cómo reducir las posibilidades de transmisión a otros y cómo ha sido la experiencia de otras personas que viven con el VIH.
También tómate el tiempo para aprender todo lo que puedas sobre tu propio diagnóstico. Guarda copias de toda tu documentación médica y lleva un registro acerca de cómo te sientes. Esta información puede ayudarte a sentirte más en control y más preparado para hablar con tus profesionales de atención médica.
Sea honesto con sus profesionales de atención médica
El tratamiento del VIH implica a veces hablar de temas incómodos con el personal médico, como los antecedentes sexuales, el consumo de alcohol y sustancias, las evacuaciones intestinales, la salud mental y las cuestiones económicas.
También debes ser honesto acerca del consumo de los medicamentos prescritos, y si te has saltado alguna dosis. Ser capaz de ser honesto sobre estos temas es importante para abordar tus necesidades como paciente y obtener la atención adecuada.
Pregunte
Vivir con VIH conlleva preguntas. Preguntas sobre tu salud, ahora y en el futuro. Preguntas sobre cómo hablar con los demás sobre tu diagnóstico. Preguntas sobre cómo lidiar con el estigma, el estrés y otras cargas mentales y emocionales que a menudo forman parte de la vida con VIH.
Recuerda que tu equipo médico será tu mejor fuente de información. Ponte en contacto con tus profesionales de atención médica cada vez que tengas una pregunta sobre los resultados del laboratorio, cómo tomar un medicamento o cualquier síntoma o efecto secundario que estés experimentando.
Una vez más, llevar un registro de tu experiencia diaria puede ser útil. Un diario es un buen lugar para anotar las preguntas que se pueden hacer en la próxima cita médica.
Centrarse en un estilo de vida saludable
Un estilo de vida saludable es importante para todo el mundo y especialmente para quien vive con VIH. Dado que este virus puede afectar al funcionamiento de tu sistema inmunológico, debes hacer todo lo posible para mantener tu cuerpo sano, evitar enfermedades y evitar complicaciones.
Las partes esenciales de un estilo de vida saludable incluyen llevar una dieta equilibrada, hacer ejercicio, dormir lo suficiente y evitar hábitos poco saludables (como fumar, consumir alcohol y drogas).
Concéntrese en su salud mental
Vivir con una enfermedad grave como el VIH puede afectar tu salud mental y emocional. Hable con su personal médico sobre cualquier emoción difícil o negativa que experimente, como tristeza, estrés, ira, irritabilidad o desinterés por sus actividades habituales. Pueden ser signos de ansiedad o depresión.
Sus profesionales de la salud pueden ayudarle a encontrar estrategias de afrontamiento y, si es necesario, remitirle a un profesional especializado en salud mental.
Compruébelo usted mismo
Defender tu salud cuando tienes el VIH es un proceso continuo. Es importante que observes y evalúes tu estado de salud con regularidad. Consulta a tus profesionales de la salud si tus necesidades cambian a lo largo del proceso. Recuerda que tú sabes mejor que nadie cómo te sientes en el día a día.