Preguntas para Hacer al Comenzar un Nuevo Tratamiento para la Esclerosis Múltiple

La esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad autoinmune que daña el sistema nervioso central (el cerebro y la médula espinal). Una enfermedad autoinmune es una condición en la que el sistema inmunológico del cuerpo ataca las células y los tejidos sanos.

Cuando una persona tiene EM, el sistema inmunológico ataca la mielina. La mielina es una capa de tejidos grasos y proteínas que cubre y protege los nervios. El daño a la mielina interrumpe la comunicación entre el cerebro y diferentes partes del cuerpo.

Los síntomas de la esclerosis múltiple 

Los síntomas de la EM pueden incluir debilidad muscular, problemas con el equilibrio y la coordinación, y dificultades para pensar y recordar. Las personas con EM pueden experimentar entumecimiento, sensaciones de hormigueo y dolor. También pueden tener problemas oculares, como visión doble, visión borrosa, colores que parecen grises y movimientos oculares incontrolados.

Diferentes tipos de esclerosis múltiple 

Existen diferentes tipos de EM. El tipo más común es la esclerosis múltiple remitente-recurrente (EMRR). Las personas que tienen este tipo experimentan episodios en los que los síntomas empeoran o aparecen nuevos síntomas. Entre los episodios, hay períodos en los que la persona experimenta una recuperación total o parcial de los síntomas. Otros tipos de EM incluyen:

• Esclerosis múltiple secundaria progresiva (EMSP): Muchas personas con EMRR eventualmente desarrollan este tipo. Una persona puede experimentar recuperaciones parciales, pero los síntomas progresan y se vuelven más severos con cada episodio. 
• Esclerosis múltiple primaria progresiva (EMPP): Los síntomas empeoran progresivamente desde el inicio y no hay períodos de remisión. La esclerosis múltiple primaria progresiva afecta aproximadamente al 15 por ciento de las personas con EM. 
• Esclerosis múltiple progresiva recurrente (EMPR): Con este tipo, los síntomas empeoran de manera constante y hay episodios en los que los síntomas se vuelven más severos. Aproximadamente el 5 por ciento de los casos de EM son EMPR.

Otras condiciones también pueden clasificarse como esclerosis múltiple. Un ejemplo es el síndrome clínicamente aislado (SCA). Una persona que tiene SCA experimenta un solo episodio de síntomas de EM. Este episodio es similar a una recaída, pero no hay episodios adicionales.

Tratamiento para la esclerosis múltiple  

No existe cura para la EM, pero la condición puede manejarse. Los principales tratamientos para la EM son las terapias modificadoras de la enfermedad (TME). Estos son medicamentos que ayudan a prevenir los episodios y a ralentizar la progresión de la EM. Las terapias para reducir la gravedad de las recaídas y controlar los síntomas también son parte del tratamiento. El ejercicio, la fisioterapia, los cambios en el estilo de vida y el apoyo social también son importantes.

El tratamiento de la EM puede cambiar con el tiempo. Es posible que una persona necesite cambiar de un TME a otro por diversas razones: un medicamento no funciona tan bien como debería, efectos secundarios, cambios en el seguro o dificultad para tomar el medicamento según las indicaciones.

Los cambios en el tratamiento siempre deben realizarse bajo la supervisión de un proveedor de atención médica. Como persona que vive con EM, también es importante desempeñar un papel activo en su atención.

Haga estas preguntas a su proveedor de atención médica cuando cambie de tratamiento o comience un tratamiento nuevo:

• Cómo se llama el medicamento?
• ¿Cómo se toma este medicamento? ¿Es una pastilla, una inyección o una infusión?
• ¿Cuál es la dosis que tomaré?
• ¿Por qué se recomienda este medicamento?
• ¿Cómo trata este medicamento la EM?
• ¿Puede este medicamento causar efectos secundarios?
• ¿Cuándo sabremos si este medicamento está funcionando?
• ¿Qué podemos hacer si este medicamento no funciona?
• ¿Puede este medicamento interactuar con otros medicamentos? Su proveedor de atención médica debe tener una lista de todos los medicamentos que está tomando. Esta lista debe incluir medicamentos recetados, medicamentos de venta libre, vitaminas, suplementos nutricionales y suplementos a base de hierbas.
• ¿Puede este medicamento afectar el embarazo? Informe a su proveedor de atención médica si está embarazada o planea quedar embarazada.
• ¿Cuánto cuesta este medicamento? ¿Con quién puedo hablar si me preocupa el costo de este medicamento?

Sus proveedores de atención médica serán su mejor fuente de información. Siempre haga preguntas si algo no está claro o si desea una explicación.